[ Amplificador integrado a válvulas George Hi-Fi 50/50 ]

Esta es una audición que debería haber realizado hace ya tiempo pero que las circunstancias, el trabajo y esos lios del dia a dia que todos padecemos han ido aplazando. Para mi es especial poder comentaros mis impresiones acerca de este amplificador ya que se trata de un diseño que he visto como nacia de las manos de Jorge Bueno, mi gurú personal en el tema de electrónica a válvulas y un verdadero experto donde los haya. Jorge Bueno es la cabeza pensante de Amptek, una pequeña empresa de nuestro pais que se dedica a la fabricación y reparación de equipos de amplificación profesional a válvulas para músicos y de equipos de alta fidelidad igualmente a válvulas. Jorge Bueno es Ingeniero de Telecomunicaciones y aunque previamente habia ejercido su profesión en el ámbito de la empresa privada, finalmente decidió, para recogijo de los aficionados al audio a válvulas, establecerse por su cuenta y empezar a desarrollar su labor en este mundo. Os puedo asegurar que Jorge es un verdadero pozo de conocimientos. Su gran especialidad es la amplificación profesional para músicos, especialmente la que trata aparatos clásicos a válvulas, los cuales conoce de memoria como si el mismo los hubiera diseñado. Muchas veces le he visto hablar por teléfono con clientes y describir completamente un amplificador de memoria con todo detalle. Además de estas tareas, Jorge escribe para la revista especializada Guitarra Total y desde el año 2000 su empresa realiza las tareas de Servicio de Asistencia Técnica Oficial de los productos de distribuye en nuestro pais Thorens Ibérica. Asimismo, Amptek importa para España numeroso material de electrónica de alta calidad, tales como los condensadores Sprague, las válvulas Electro-Harmonix y Ruby Tubes, los transformadores Hammond y un largo etcétera dificil de recordar. Si sois aficionados a la electrónica a válvulas y necesitais ayuda de cualquier tipo o buscais ese componente que no sois capaces de encontrar, Amptek y Jorge Bueno son vuestra solución. Y para rematar el tema, Jorge es músico con lo que tiene, aparte de unos conocimientos teóricos y técnicos del todo contrastados, un oido fino. ¿Alguien da más?





El amplificador del que aqui hablamos es el modelo denominado George Hi-Fi 50/50. Se trata de un amplificador integrado de unos 40-45 watios por canal, en configuración push-pull ultralineal y clase AB. Utiliza como válvulas de previo 4 Ruby Tubes 12AU7 de origen Philips y como válvulas de potencia 4 Electro-Harmonix EL34 (la mejor reedición a dia de hoy de la Mullard EL34 original). Otras características del equipo son: cableado a mano, conexiones punto a punto con estaño de calidad (no usa ningún circuito impreso) , chasis de hierro cromado de 2 mm serigrafiado en castellano, transformadores de salida ultralineales Hammond 1650P, transformador de Alimentación Amptek, condensadores de paso de señal Sprague Orange Drop, condensadores electrolíticos Ruby Gold Caps, zócalos cerámicos para todas las válvulas, selector de volumen Alps Blue Velvet, tres entradas de línea de 500mv de sensibilidad y salida para altavoces de 4, 8 o 16 ohmios.





La filosofia que subyace en el diseño de este amplificador es la de que este aparato ofrezca al audiofilo el nivel más alto al precio más justado con las mayores posibilidades de actualización y modificación que se requieran. Esta es una filosofia muy común en paises como USA y UK donde el DIY (do-it-yourself / hagaselo usted mismo) esta muy arraigado en el campo de la alta fidelidad. Os puedo asegurar que el objetivo se alcanza plenamente. Es extremadamente dificil encontrar un amplificador que usando estos componentes pueda adquirirse por el precio en que Amptek comercializa su equipo (175.000 pta. IVA incluido). Para los que no esteis versados en el tema de la autoconstrucción de amplificadores a válvulas, deciros que todos los componentes que se usan son de primerísimo nivel y que podeis encontrarlos en equipos como los de Sonic Frontiers (transformadores de salida Hammond, la clave de un amplificador a válvulas), NAD y Musical Fidelity (potenciometro de volumen Alps), etc, etc. Además el hecho de que esté clabeado al aire (recordad, no usa ningún circuito impreso) permite llevar a cabo modificaciones en el circuito con gran facilidad, practicamente quitar un componente y poner otro. Es por ello que Amptek ofrece sobre esta excelente base, modificaciones tales como cambios en los condensadores de paso de señal (de Sprague a Hovland Musicap), cambios en el potenciometro de volumen (de Alps a Noble), cambios en las válvulas de potencia (de EL34 a KT 66), clase AB a A, etc. Por si no fuera poco Amptek también realiza modificaciones por encargo a gusto del consumidor. Es lo que en el argot se denomina "custom made" y "hot rodding". ¿Quién quiere una fuente de alimentación con más reserva de energia o regulada a la Red Rose Music (el ultimo trabajo del Sr. Mark Levinson)?. Para cualquier aficionado a las valvulas que busca un diseño que incorpore lo mejor en cuanto a componentes y que además brinde la posibilidad de modificar el circuito a su gusto, el George Hi-Fi 50/50 es el amplificador. Sólo, y ya lo hemos comentado varias veces con Jorge, es necesario mejorar la estética del conjunto. Unos buenos pies, unos laterales de madera y una rejilla de protección (que cuando leais esto ya estará disponible) son los unicos detalles que le faltan a este magnífico amplificador.

La audición que realicé de este amplificador tuvo lugar en mi propia casa durante un periodo de casi dos semanas. Es la primera vez que pruebo un equipo en estas condiciones, en un entorno tan familiar y por un periodo tan largo. Como podeis imaginar esto me ha permitido tener una visión muy próxima de lo que realmente ofrece este aparato. No sólo lo he probado con mi equipo principal, sino que también lo pude comprobar con mi equipo de fin de semana, es decir que lo pude escuchar en combinación con mis pantallas Quad ESL57 y comparar con mis aparatos clásicos.





Veamos el comportamiento del amplificador con mi equipo principal (ved imagen superior). En esta ocasión el amplificador estuvo trabajando en lo que yo llamaria un "ambiente hostil" para las válvulas. Sobretodo debido a los altavoces, unos Epos ES14 con 87 db/1w/1m de sensibilidad sobre 8 ohmnios. Un apunte..... Muchos aficionados me preguntan sobre amplificadores a válvulas y con que altavoces combinarlos. Este que veis aqui es un mal ejemplo de combinación. Yo no la aconsejaria, pero es lo que había. Los altavoces eran poco sensibles y el amplificador no estaba cómodo. No interpreteis que la cosa era debida al amplificador. Simplemente los altavoces no eran los adecuados. Para amplificadores a válvulas con esta potencia yo recomendaria unos 90dB-91dB de sensibilidad sobre 8 ohmnios. Si son más, mejor, aunque habitualmente son bastante más caros. El resto del equipo estaba compuesto por un CD TEAC VRDS10 SE y un plato Thorens TD 166 BC MK VI con brazo SME 3009 SIII, cápsula Benz Micro Silver y previo de phono EAR 834P (modificado con potenciometro Alps Blue Velvet y válvulas GE 5751).

El sonido obtenido en esta situación podia definirse como hibrido (que feo suena esto!). Me refiero a que mientras mantenia el típico sonido calido y redondo de los amplificadores a válvulas, era capaz de ofrecer graves consistentes y potentes al nivel de los amplificadores de estado sólido. También mantenia la rapidez de respuesta y la dinámica de este tipo de amplificadores, pero todo ello con el "calor" de las válvulas. Una de las mejoras que noté fue una reducción que los agudos más altos que con mi equipo de estado sólido estan ahora algo disparados (faltan cortinas en la sala), lo cual hacia la escucha realmente agradable. Pude probar todos mis discos favoritos. Las voces reales y definidas (p. ej. Diana Krall, Ella Fitzgerald...), el piano especialmente bueno (p. ej. Oscar Peterson: The Trio. Live in Chicago) y los graves muy bien controlados (p. ej. Pat Metheny-John Scofield: I can see your house from here). Estas caracteristicas me sorprendieron en primera instancia ya que en mis otras experiencias con amplificadores a válvulas, la mayoria clásicos, los graves por ejemplo no estaban tan bien reproducidos. Eso me hizo pensar en un articulo que podeis encontrar en TNT-Audio donde se comparaban dos ediciones del Dynaco ST 70 y se ponian de manifiesto opiniones similares que se achacaban a las diferencias de diseño en el circuito del amplificador. Hablando después de la prueba con Jorge, me confirmo que mis impresiones eran acertadas y que la rectificación en estado sólido (no usa válvula rectificadora, sino diodos) y los condensadores modernos conferian estas características al amplificador.
Una de las sorpresas más agradables del comportamiento general del amplificador, ya no a nivel acústico, sino de componentes, es el de los transformadores de salida. Los Hammond 1650P estan pensados para ofrecer sin problemas 60 watios de potencia. En la presente configuración sólo ofrecen unos 45 watios, que representan sólo un 75% de su capacidad de potencia, con lo cual trabajan extremadamente relajados. Después de largas sesiones de más de 2 horas de funcionamiento ininterrumpido los transformadores estaban igual de frios al tacto que al inico de la audición. Una muestra innegable de durabilidad. Igualmente destacables son las válvulas de potencia Electro-Harmonix EL34 que usaba la unidad probada y que en la actualidad estan consideradas por la prensa especializada (Ken Kessler en Hi-Fi News y Charlie Kittleson en Vacuum Tube Valley) como la mejor reedición de la Mullard EL34 original. En estas primeras audiciones la impresión que obtuve fué realmente buena.

Después de varios dias disfrutando del amplificador en compañia de mi vecino (que practicó la autoconstrucción de aparatos de hi-fi en sus años jovenes aunque tuvo que dejarlo porque todo el mundo le decia que las válvulas habian muerto. Por cierto, creo que todavía está alucinando) trasladé el aparato a un entono más "conveniente" para un equipo de estas características. Ese entorno no es otro que el formado por mi equipo de alta fidelidad clásico. Allí combiné el amplificador en primer lugar con mis altavoces tradicionales unos Kef Q15 (recomendados, por cierto, por los expertos de Vacuum Tube Valley) y unos Vieta Allegro. Ambas parejas de altavoces han sido seleccionados por que son lo que los ingleses denominarian "valve friendly", es decir trabajan bien con válvulas. Como os decia antes, trabajando con equipos de válvulas de poca potencia (menos de 35 watios) es mejor disponer de altavoces sensibles. Los Q15 tienen una sensibilidad de 91 dB sobre 6 ohmnios y los Vieta de 91 dB sobre 8 ohmnios con lo que facilmente se mueven con potencias a partir de 15-20 watios.
El resultado de la combinación fué muy bueno. Los excelentes resultados obtenidos en la primera prueba con mis altavoces Epos se vieron confirmados y aumentados. Ahora en un entorno menos hostil, pude comprobar que efectivamente se confirmaban los aspectos antes comentados, especialmente el referido al control graves y la dinámica propia de un amplificador de estado solido sin perder, por ello, la dulzura de la válvula.

A continuación probé el equipo con los altavoces Quad ESL57. El sonido era bueno aunque me sorprendió el hecho de que no fuera del todo de mi agrado. Quizás es que estoy acostumbrado a escuchar estros altavoces con su pareja natural, los Quad II, pero el resultado no me satisfizo. He de reconocer que los ESL57 son muy especiales y quizas no se gustaban mutuamente ambos aparatos. La escucha no se prolongó en exceso pues notaba el sonido resultante no era el que había imaginado despues de oirlo con los otros altavoces y obtener buenos resultados. En esto del audio no se pueden tener ideas preconcebidas! Esto me hace pensar en, si como amplificador moderno que es, no funciona mejor con altavoces modernos. Quizás de nuevo esos aspectos del circuito que ya he comentado antes, lo hacen más indicado en otro entorno. De las ESL57 volví a los Q15 y los Vieta y la cosa mejoró, con lo que creo que se confirmaron mis observaciones.

Antes de devolver el aparato a Jorge (había un cliente de Navarra que deseaba probarlo), pude volver a escucharlo con mi equipo principal por un periodo de tres dias y durante sesiones de más de 2 horas y decididamente el sonido si que era bueno, muy bueno. Desde un punto de vista subjetivo, me pareció mejor esta segunda prueba con los altavoces Epos que la primera. De hecho ya me estaba acostumbrando al sonido del amplificador y podia prescindir de él. Es decir ya no lo escuchaba, sólo escuchaba la música. Muy agradable, mi vecino y yo disfrutando. Esa es la esencia de la alta fidelidad.

Finalmente y a modo de resumen acerca de esta audición. Pocas veces me lo he pasado tan bien y he tenido tantas facilidades para probar un equipo. Por eso, gracias Jorge. Sobre el amplificador, a nivel constructivo no hay ninguna objeción a hacer, muy al contrario. Los componentes son de excelente calidad, muy buenos, internacionalmente contrastados, fiables y a raiz de las pruebas realizadas de una durabilidad asegurada. Si a esto le añadimos que el amplificador aún se puede mejorar más en este aspecto e incluso se pueden llevar a cabo modificaciones a gusto del consumidor y todo ello por un precio muy contenido (¿sabeis que el aparato más economico que conozco a un nivel similar ronda las 230.000 pta?) puedo asegurar que la relación global calidad-precio es una de las mejores que podeis encontrar (de hecho la mejor). En cuanto al sonido podemos resumirlo con una frase del tipo "sonido de válvulas con la garra del estado solido". Con permiso de Jean-Luc Picard, ¿lo mejor de los dos mundos?





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